domingo, 3 de julio de 2011

Nunca se encuentran las respuestas dentro de uno mismo.

Si ahora nos encerrasen en una habitación por el resto de nuestra vida, sin ninguna posibilidad de contacto con el exterior, no cambiaríamos. Físicamente sí, pero nuestras ideas, lo que creemos, lo que pensamos sobre la vida seguiría siendo lo mismo. En todo caso entraríamos en un bucle de desesperación al principio y luego nos volveríamos al apatismo, a la depresión. Pero estas son reacciones ante la imposibilidad de tener contacto social.

Las respuestas que queramos dar a la vida son diferentes para cada persona. Estas dependen de sus experiencias, de su contexto, de aquello de lo que se rodee.

Sin esto, nunca nos definiremos, nunca nos descubriremos.

Aislarse del mundo significa convertirse a lo estático.

Empaparse de personas, experiencias e historias es lo más cercano a no sentirse perdido.

viernes, 17 de junio de 2011

Primer Contacto

Se había pasado toda su vida solo, sin haber tenido contacto alguno con los de su especie. Se asemejaba más a un iceberg ambulante que a un animal.

No encontraba las emociones. Se sentía totalmente abandonado entre desconocidos, que no eran como él, que no le comprendían ni podían hacerlo. Tampoco se entendía a sí mismo. No sabía de donde venía, cómo había llegado a ese lugar.

Un día, su vida cambió por completo.

Cuando la vio por primera vez, algo totalmente inédito aconteció en su interior. La soledad, que durante tanto tiempo le había acompañado, mano a mano, durante toda su vida, a la cual ya se había acostumbrado, se esfumó.

En ese momento se vio reflejado en ella. Se encontró a sí mismo al encontrarla a ella. Tenía cuatro patas como él. Bigotes, orejas puntiagudas.

Se acercó a ella con temor, con cuidado, sigilosamente y la olfateó. El primer contacto. Le gustaba su olor. Le acarició el pelo del cuello lentamente con su cabeza.

Ella, pequeña aún, tenía frío y temblaba.

Entonces, él sacó todo el cariño que se hayaba en su interior, escondido en algún rincón y se puso junto a ella, protegiéndola y dándole calor.

Sintió.

Sintió como nunca antes había sentido.



Ana Mateos

sábado, 11 de junio de 2011

Alguien me dijo una vez...

Alguien me dijo una vez que todo ya estaba escrito en el amor, que todo estaba dicho. Que era imposible añadir una frase más, ni tan siquiera una palabra más. La cosa se volvía repetitiva. Tantos libros atrás, tantos autores que lo han bordado ya desde multitud de ángulos. Tantas metáforas ya empleadas. ¿Qué podrías añadir tú a eso? - me preguntó.

Lo reflexioné por unos instantes. Casi por un momento me lo creí. Bueno, para qué negarlo, me lo creí. Y estuve así durante mucho tiempo, vagando por la vida creyendo que si me enamoraba no iba a ser nada del otro mundo, un fenómeno más, repentino, que acabaría siendo algo que se olvida con el paso del tiempo. Que no repercutiría. Que sería algo más del montón.

Pero entonces, un día, de repente, llegaste tú. Con qué facilidad me rompiste los esquemas. Los echaste por el suelo y, con un beso, me abriste los ojos.

Ahora sé que en las historias de amor no hay una igual. Desde el momento en que cambian los personajes cambia todo su conjunto.

Ahora somos tú y yo. Yo y tú. Nuestra historia.


Ana Mateos

domingo, 15 de mayo de 2011

Microrrelato 8: Resignación

De pronto, tumbada en la hamaca de la playa, notó como el Sol se ocultaba repentinamente. Abrió los ojos. Una ola de 20 metros se alzaba sobre ella.

No sintió pena, ni tampoco tuvo ganas de correr. Se resignó y volvió a cerrar los ojos.


Ana Mateos

La Historia del Espermatozoide Perdido

- HOLA
- HOLA
- HAY ALGUIEN AHI?
- HAY ALGUIEN AHÍ?
- ECO
- ECO
- EEEEEEECO
- EEEEEEECO
- POR FAVOR, SI HAY ALGUIEN AHI QUE RESPONDA.
- POR FAVOR, SI HAY ALGUIEN AHI QUE RESPONDA.
- SOY UN ESPERMATOZOIDE PERDIDO EN EL CUERPO CAVERNOSO DEL PENE.
- SOY UN ESPERMATOZOIDE PERDIDO EN EL CUERPO CAVERNOSO DEL PENE.
- QUE ALGUIEN ME AYUUUUUUUDEEEEEEEEEE.
- QUE ALGUIEN ME AYUUUUUUUDEEEEEEEEEE.
- ANDA, AHÍ ESTÁN MIS COMPAÑEROS PARA SALVARME. ¡VAYA! ¡VIENEN MUY RÁPIDO! ¡TRANQUILOS COMPAÑEROS! ¡ESTOY AQUI! VIENEN DEMASIADO RÁPIDO. NO SE PARAN. PERO...
...
...
...

- OH DIOS MIOOOOOO SÁLVESE QUIEN PUEEEEEEEEEDAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA.

Y el espermatozoide murió estampado en la punta de un condón.

FIN


Ana Mateos

miércoles, 2 de marzo de 2011

A

No debemos decir nunca que no a una experiencia nueva. Puede no interesar a simple vista, pero quién sabe si esta puede aportarte algo. Este algo puede ser cualquier cosa, buena o mala. No tiene sentido pasar por la vida mirando lo que ocurre a nuestro alrededor y decidiendo aquello que queremos o no queremos vivir. Creando un planning. Calculando los horarios y cuadriculando el futuro. ¿Dónde queda la improvisación? No decidimos qué vivir, simplemente lo vivimos. Seguimos el camino que trazan inconscientemente nuestros pies.

Nunca debemos desechar los sueños, apartarlos de nuestro lado. Siempre es necesario aspirar a más. No existen las fronteras ni los márgenes. Pinta y salte del contorno. Eres un alma libre. Como yo, como todos. Nunca contestes negativamente a aquello que la vida te muestra. Déjate llevar. Prueba a hacer cosas difíciles, cosas extrañas que nunca antes te habías parado a pensar. No vayas por el camino seguro. No te cubras de la lluvia con un paraguas. Tiralo, mira al cielo y empápate. Duda de todo aquello que te dicen. Nunca te conviertas al conformismo.

Tú eres el único juez de tus actos.

lunes, 21 de febrero de 2011

¿Son éticos los transgénicos?

El ser humano peca de ser un animal antropocéntrico, es decir, se cree con derecho a erigirse ante todo ser viviente que no sea de su condición. En nombre de la inteligencia y el raciocinio utiliza a los denominados por él mismo seres inferiores, y, como un pseudodios los manipula a su antojo, para que, como esclavos, cumplan las tareas que se les han encomendado. La población humana aumenta en número considerablemente con los años. Cómo alimentar a tantos millones de personas, cómo repartir la producción. La ganadería intensiva y los transgénicos parecen ser las únicas soluciones. Millones de esclavos mudos que trabajan para nosotros y por los que poca gente parece interesarse. Los intereses de la Humanidad están por encima de todo lo demás. Hemos llegado a un punto en el que los límites no están claros. La ciencia ficción es el presente. La ingeniería genética sigue experimentando y continúa haciendo lo que no está escrito. Un juego no tan de niños que no sabemos hacia dónde nos puede llevar. ¿Es ético crear una especie nueva artificialmente para que nos aporte todo cuanto necesitamos? Está claro que aún no sabemos qué puede ocurrir en un futuro, qué consecuencias habrán. Por ahora, hay que tener en cuenta este problema y obligar a las empresas que etiqueten los alimentos según sean transgénicos o no. Lo que hay que tener claro es que no estamos solos en este planeta. Que hay millones de seres que viven entre nosotros y no para nosotros. Que también tienen derechos e integridad. Que crean conexiones entre sí importantísimas, tanto para nosotros como para el planeta. No están ahí para servirnos a nosotros. Tan solo son la expresión de una de las cosas más maravillosas del universo, única –según nos consta actualmente- en este planeta: la vida.